La osa Yupik, informe de AZCARM

La Osa polar Yupik fue rescatada casi recién nacida en Anchorage, Alaska, luego de que una excavación en glaciares acabó con su madriguera.
En 1992 la trajeron al Zoológico Benito Juárez, de Morelia, cuando tenía tan solo tres meses de edad.
Desde 1992 a la fecha Yupik no ha sufrido problemas de salud, y la cardiopatía detectada en años anteriores, fue tratada exitosamente, y es que el zoológico desde su llegada le ofreció las condiciones óptimas y el cuidado de profesionales.
En junio del 2017 la Asociación Civil canadiense Zoocheck solicitó el traslado de Yupik a un “santuario” en Reino Unido argumentando que la Osa polar no debe vivir en el clima caluroso de Michoacán.
Posteriormente Zoocheck ha argumentado que la intención de trasladar a Yupik al Reino Unido es para someterla a un proyecto de investigación llamado: “Traslado y aclimatación de Oso polar”, para poder obtener datos e información sobre su conservación y adaptación al cambio climático.
En primera instancia queremos dar a conocer que Yupik no será trasladada a un “santuario” como se ha hecho creer, sino simplemente a otro zoológico privado llamado Yorkshire WildLife Park, en Inglaterra, que no pertenece a la Global Federation of Animal Sanctuaries.
En segundo término Yupik está por cumplir 26 años este próximo 27 de febrero, excediendo 50 por ciento su expectativa de vida que es de 18 años en promedio. Y es que en estos 26 años, las condiciones y cuidados que le ha proveído el zoológico de Morelia, han permitido su óptimo bienestar integral.
En tercer lugar, se ha dado a conocer que en caso de que Yupik fuera trasladada al zoológico de Inglaterra “interactuaría por primera vez en su vida con otros cuatro osos polares machos”, hecho que resultaría muy riesgoso para la osa, porque los osos polares son solitarios por naturaleza. Y además, porque Yupik ya es una osa de edad avanzada que podría estar expuesta al rechazo.
En cuarto lugar, los expertos en la materia consideran que sería muy riesgoso física y anímicamente el traslado de la Osa polar porque son alrededor de 15 horas de viaje al Reino Unido, en las que tendría que estar anestesiada y por su avanzada edad podría no resistir los efectos de dicho procedimiento, especialmente considerando el antecedente de su cardiopatía.
En quinto término, el Artículo 55 Bis de la Ley General de Vida Silvestre precisa que: “Queda prohibida la importación, exportación y reexportación de ejemplares de cualquier especie de mamífero marino y primate, así como de sus partes y derivados, con excepción de aquellos destinados a la investigación científica, previa autorización de la Secretaría”. En este sentido es muy importante resaltar que, el supuesto proyecto de científico al que sería sujeta Yupik, no es una investigación rigurosa porque no está avalada por ninguna institución de investigación superior ni por ningún investigador titular y no cuenta con sustento suficiente, ya que no cumple con el método científico.
Por todo lo anterior, esperamos que Rafael Pacchiano, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, no ceda a presiones y se mantenga en su postura de no autorizar el traslado de Yupik, en cumplimiento del marco legal nacional y mostrando sensibilidad por el bienestar de la Osa polar, de la cual solo hay dos ejemplares en nuestro país.
Hacemos una llamado a la sociedad y a los expertos en el cuidado y protección de animales a que no permitamos que Yupik sea arrebatada de su hogar, de su familia y de su país, que ya es México, en donde ha estado rodeada de amor y cuidados especializados.
El futuro de Yupik no puede estar en riesgo por un capricho político o por los intereses de una organización que no ha podido justificar ni sustentar con objetividad científica su traslado al Reino Unido.